La Casona de Tudanca, cuando un lugar vale más por lo que guarda
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En www.cantabreando.com hoy te proponemos una visita a Tudanca y a la Casona que perteneció a José María de Cossío y que, a su fallecimiento en 1977, pasó a ser propiedad de la Diputación regional.
Tudanca, cuyo casco urbano está declarado Monumento Nacional en la categoría de Conjunto Histórico, es un claro ejemplo de arquitectura montañesa en estado puro.
En plena montaña, en la zona del Nansa, guarda con recelo ese sabor añejo de las buenas costumbres de la tierruca.

Hasta el aire que se respira parece distinto en este lugar alejado del mundanal ruido y donde el silencio se convierte en el mejor de los aliados.
Un lugar donde La Casona de Tudanca, de 1752, es su mayor exponente.
La mandó construir Pascual Fernández de Linares, un indiano que, tras hacer su fortuna en Perú, retorna a su pueblo y trata, mediante su edificación, mostrar su riqueza.
Legado interior
Sin embargo, la singularidad de la Casona está en el legado interior que dejó su último propietario, José María de Cossío.
Así, el arte y la literatura tienen una representación significada, pero también el mobiliario que desde 1752 fue incorporado a la casa.
Piezas de uso cotidiano, junto a obras realizadas por artistas de primer nivel, conforman una colección heterogénea y particularmente valiosa.
En cuanto al mobiliario es reseñable las camas, baúles, arcones, sillas o mesas, armarios o bargueños de diferentes estilos y procedencias expuestos en disposición de ser utilizados.
La parte artística tampoco se queda atrás con óleos, acuarelas, grabados, dibujos, esculturas en terracota o bronce, talladas en madera y ricamente policromadas.
Del mismo modo, se conservan sábanas bordadas, colchas y manteles, junto a casullas antiguas ricamente bordadas, o un poncho ceremonial peruano bordado en plata con el escudo familiar.
La parte más valiosa del lugar es su archivo y la biblioteca. Los manuscritos literarios, la correspondencia autógrafa o las fotografías de los principales escritores del S. XX convierten esta parte de la colección en referente nacional.
No en vano, entre las potencialidades que ofrece este edificio destacan su patrimonio Indiano, literario con originales de la generación del 27, arquitectónico, etnográfico y taurino, ya que Cossío redactó la enciclopedia más completa sobre la tauromaquia.
Valorar el inmueble
Hace unas semanas, el consejero de Educación, Cultura y Deporte, Francisco Fernández Mañanes, mantuvo una reunión en la Casona con los alcaldes de la zona, unidos en comisión, para valorizar dicho inmueble como activo económico y cultural de la Mancomunidad del Saja-Nansa.
En la reunión, se puso de manifiesto la necesidad de que esta Casona mantenga un horario de apertura continuado para “volver al flujo de visitantes de hace años, cuando se alcanzaba más de 5.000”.
El eje de trabajo de esta comisión es redactar un plan de actuación para la valorización de la Casona de Tudanca y su entorno, aplicando una perspectiva territorial más allá de las competencias sectoriales de cada uno de los agentes implicados.
Propuestas
Dicha comisión ha elevado una serie de propuestas de actuación como la firma de un convenio de colaboración interadministrativo con vocación de permanencia entre las entidades locales y agrupaciones y el Gobierno de Cantabria.
Además se solicita la creación de un grupo de trabajo interdisciplinar para diseñar y ejecutar el Plan de Actuación y Gestión, que consistirá en el diagnóstico de la situación actual de la Casona de Tudanca (modelo de gestión, dotación de personal, programa de actividades, etc.), junto con la elaboración de objetivos y directrices encaminadas a promover una mayor dinamización de la propia Casona y del territorio, contando con el apoyo de otros equipamientos culturales y diseñar un programa anual de actividades a desarrollar en dicho entorno.
Actividades académicas y turísticas
En este capítulo se sugiere realizar durante el año escolar un programa de visitas para alumnos de bachiller a la Casona en colaboración con institutos o bien la Consejería de Educación, Cultura y Deporte, y la de Innovación, Industria, Turismo y Comercio.
Asimismo, se anima a firmar convenios con las universidades de Cantabria y de Comillas (Centro Universitario CIESE Comillas) para realizar cursos, charlas, y cursos de verano.
También se propone organizar paquetes turísticos que discurran por la comarca con distintas temáticas, que incluyan los principales recursos del Nansa. En este ámbito, se quiere ofertar una visita a la Casona de Tudanca y aprovechar otros recursos presentes en la zona para pernoctar u organizar otras actividades complementarias, como la Casa Rectoral de Puente Pumar, la Biblioteca de Tudanca, Albergue municipal, alojamientos rurales, etc.
Ámbito artístico y de creación
En el plano artístico y de creación, se plantea realizar acuerdos con asociaciones literarias, clubes de lectura, etc. para hacer sesiones en La Casona.
Además poner en marcha jornadas teatralizadas por el pueblo de Tudanca dando cabida al patrimonio etnográfico (Prado Concejo, la Basna, razas autóctonas de ganado…) y literario basado en obras de autores que describan esta zona diseñando Rutas Literarias sobre escritores como José María de Cossío, Manuel Llano, etc.
En deporte, se contempla la posibilidad de diseñar una prueba trail siguiendo la ruta de Peñas Arriba.